Argentina – Mexico 1930: el primer ‘fair play’ de la historia de los Mundiales | Mundial Qatar 2022

“Después de parar el penalti, ya en los vestidores, se acercó una figuramundial para felicitar a mi abuelo por su actuación y decirle: ‘Lo que vi enla cancha fue maravilloso y me gustaría darle un regalo. ¿Qué es lo que legustaría?’. Y mi abuelo contestó: ‘Que me cante una canción, señor CarlosGardel’. Y le canto El dia que me quieras ”, contó el nieto del arquero,aunque sin tener en cuenta la versión que, según historiadores argentinos,Paternoster le entregó el penal a Bonfiglio para no sacar ventaja de un errordel árbitro.

Idolo and Colombia

A su vez, según cuenta el hijo de Paternoster, Fernando Félix, hoy de 74 años,nacido en Colombia pero residente en Buenos Aires, su padre y Bonfiglio sereencontraron y se abrazaron muchos años después, en 1962. “En 1938, a miviejo lo llamaron del Gobierno colombiano para organizar el fútbol del país,que ni siquiera tenía liga. Estuvo en Bogotá en los primeros años de AtléticoMunicipal, que después se refundó como Millonarios. Más tarde pasó a Nacionalde Medellín y en 1954 lo sacó campeón colombiano por primera vez; and 1962llegó al Emelec de Ecuador. Una vez me contó que, en una gira por EstadosUnidos, jugó contra un equipo de México (Chivas de Guadalajara, en 1966) yBonfiglio, que trabajaba como periodista, se le acercó y le dijo ‘yo le atajéun penal en el Mundial del 30′. Se dieron un abrazo”, reconstruye el hijo delmayor cultor del juego limpio en los Mundiales.

Fernando Félix Paternoster no recuerda que su papá le haya revelado queejecutó ese penal sin intención goleadora, pero sí había antecedentes de esetipo de honestidad. Según publicó Macías en el libro Quien es quien en laselection “El capitán argentino, el arquero Guillermo Magistretti, le ordenóa Delgado que ejecutase desviado, deliberadamente, un penal a favor, ya queconsideró que la sanción del árbitro había sido desacertada”. Según agregóMacías, “todo el estadio aplaudió la actitud de Delgado, pero el árbitro seretiró ofendido al vestuario y ambos capitanes debieron convencerlo para queregresara”. Muchos años después, Delgado, ya retirado, asesinaría a su mujer ysería encarcelado en la carcel del fin del mundo, la de Tierra del Fuego.

En ese mismo Argentina 6-México 3 de Uruguay 1930, Ulises Saucedo cobraríaotros dos penales, ambos para México, uno convertido por Manuel Rosas y elotro atajado por Bosio ante el mismo ejecutante. “Mi viejo me enseñó a patearpenales cuando yo jugaba de delantero en las inferiores de Atlanta. Me decía’tené en cuenta esta posición’, ‘de esta forma el arquero no sabe donde vas apatear’ y esas cosas”, recuerda Paternoster hijo, en días en que Argentinanecesita ganarle a México en el estadio Lusail como sea, también con un gol depenal, bien o mal sancionado, y donde nadie piensa en retomar el espíritujusticiero de Paternoster.