Sí, se puede ser feliz por una clasificación a octavos de final | Mundial Qatar 2022

Vos no te vas a acordar de lo que está pasando ahora, Gino, hijo mío, peromientras dormís y sufrís por los gases que presionan tu pancita y te molestan,Argentina acaba de clasificarse a los octavos de final de esta Copa del Mundodespués de ganarle a Polonia y de habernos dejado algunas enseñanzas que megustaría compartirte. Ya lo sé: vos tenés un mes y 10 días de vida y te da lomismo. Lo noto cuando en casa puteamos a los gritos y tu sueño no se altera ocuando llorás por los benditos cólicos que nos hacen sufrir a todos por estosdías. No te preocupes, es una etapa y se supera, así como esta selección pasóel primer traspié con Arabia para ir de menos a más y esta tarde finalmentesentirse cómodo con su juego. Ya te va a pasar, vas a ver. El fútbol, ​​Gino,es nuestra excusa para ser felices: el minúsculo espacio que elegimos pararecluirnos a sentir, a corazón abierto, en un mundo que a veces, la mayoría delas veces, te obliga a guardar emociones. Ahí, en este huequito con pelota,por televisión o en la cancha, jugando o mirando, logramos sonreír inclusocuando todo tira para abajo.

No te vas a cordar de este día, hijo mío, pero Argentina ganó con el fútbolque nos gusta. Con un equipo protagonista, que eligió la manera de circular lapelota y la forma de lastimar al rival. Que no especuló. Que fue al frente ybuscó en su caja de herramientas, con paciencia y cuando el rival se cerraba,las mejores opciones para llegar al gol. Lección, entonces, hijo: no hay quedesesperarse cuando la presión aprieta. Se puede buscar el disfrute y tenerlocomo brújula cuando el camino se traba.